Coníferas son un gran activo en cualquier jardín ornamental digno de ese nombre. Aunque siempre pensamos en árboles gigantes de muchos metros de altura, también encontramos especies tupido muy interesante como el enebro rastrero, conocido científicamente como Juniperus horizontalis.
En esta guía queremos hablarte de las principales características de este conífera de bajo crecimiento y condiciones de mantenimiento si quieres cultivarlo en tu jardín. Este tipo de especie requiere poco mantenimiento y poco control en cuanto a fertilización y riego, muy moderado y generoso solo en fechas muy calurosas.
Características principales de Juniperus horizontalis
Su nombre común es arbusto de enebrouna especie de porte bajo que crece principalmente en las zonas montañosas de América del Norte, con inviernos fríos y veranos calurosos.
Y es precisamente que la característica principal de la Juniperus horizontalis es eso por lo general no supera los 30 cm de alturapor lo que prácticamente se comporta como un arbusto rastrero que puede llegar a cubrir varios metros de superficie.
Sus brotes son muy delgados, con hojas muy fácilmente identificables típicas de las coníferas, tonos verde-amarillos apagados y bayas en forma de cono que almacenan semillas. El enebro arbustivo es uno especies dioicaspor tanto podemos encontrar especies macho y otras hembras.
Aunque históricamente se ha adaptado al continente americano, particularmente a Norteamérica y al sur de Canadá, puede adaptarse al clima mediterráneo, aunque prefiere climas con inviernos frios y temperaturas bajo cero.
Como la mayoría de las coníferas, Juniperus horizontalis es un arbusto de crecimiento muy lento y una especie muy longeva.
cultivar
En términos generales es una especie poco utilizada en jardinería ornamental, aunque se distingue por su aspecto rastrero frente a las grandes coníferas. Se puede utilizar para cubrir grandes superficies, junto con otros tipos de tapicería. Para ello encontramos los siguientes cultivares que se distinguen por tamaño y desarrollo:
Los principales cultivares son: ‘Bar Harbor’, ‘Blue Acres’, ‘Emerald Spreader’, ‘Green Acres’, ‘Wiltonii’.
Nombres comunes: enebro rastrero, cedro rastrero o enebro rastrero.
Juniperus horizontalis ‘Gold Strike’, con puntas amarillas. Fuente: landscapeplants.oregonstate.edu
taxonomía
- Pedido: Pinales
- Familia: Cupresáceas
- Tipo: enebros
- Especies: Juniperus horizontalis
Guía de cultivo y consejos de mantenimiento
Localización y climatología del enebro rastrero
El hábito de crecimiento de la Juniperus horizontalis es en ambientes fríos, con inviernos donde suele haber nieve. Podemos colocarlo en cualquier superficie de suelo, con una buena presencia de luz. Esta parte es lo suficientemente importante como para que sus tallos continúen extendiéndose por el suelo.
No debes preocuparte por posibles heladas, ya que es un arbusto muy resistente.
Tipo de suelo y sustrato
Preparación del suelo antes de plantar Juniperus horizontalis sigue la misma dinámica que cualquier otra conífera. Se prepara un pequeño hoyo de plantación al que se le añaden de 2 a 3 kg de materia orgánica bien descompuesto.
Soporta cualquier textura de suelo, aunque se desarrolla mejor en suelos no pesados, como los arenoso o arcilloso. Es importante asegurar siempre un buen drenaje, y aunque es común a la mayoría de las plantas, se debe tener especial cuidado en el caso de las especies de coníferas, ya que suelen padecer la ‘enfermedad del pardeamiento’, causado por el hongo fitófora, que vive en condiciones de suelo pantanoso.
Dosis de riego de Juniperus horizontalis
me toleran muy bien períodos de sequía, por lo que el riego debe ser moderado. Los primeros años de vida, para favorecer la producción de raíces superficiales, seremos más generosos, pero nunca encharcando el suelo y garantizando un buen nivel de sustancia orgánica que permita drenaje adecuado del exceso de humedad.
Cultivadas en el jardín, lo más conveniente es la instalación de riego por goteo, colocando 1 dosificador de 4 L/h a 10 cm del tronco principal.
- Riego en primavera y verano: 3 riegos a la semana de 40 minutos
- Riego en otoño e invierno: 1 a 2 riegos por semana de 20-30 minutos de duración
En caso de lluvia, evitaremos regar esa semana si la precipitación supera los 3 litros/m2.
Uso de fertilizantes
Dependiendo del interés que tengamos por el enebro rastrero en nuestro jardín, podemos aportar abonos en los primeros años de vida. No es una condición importante siempre y cuando restablezcamos las necesidades del suelo aportando materia orgánica al menos cada 2 años.
Si tratamos de fomentar su desarrollo y nos hemos encontrado con uno ligera clorosis en las hojas (falta de nitrógeno, magnesio o hierro, este último especialmente en suelos calcáreos), podemos añadir fertilizantes granulares a principios de primavera y repetir durante el verano.
Recomendamos el granulado de fácil aplicación, con alta concentración de nitrógeno y azufre para acidificar el ambiente radicular en coníferas. Una mezcla recomendada es NPK (Mg+S) 12-8-16 (3-25) y oligoelementos.
Juniperus horizontalis ‘bar puerto’
Poda y mantenimiento del enebro rastrero
El enebro rastrero no necesita de cualquier tipo de mantenimiento o poda, por ser una conífera de crecimiento lento. Si vemos que alguna rama se desvía de la estructura natural del arbusto o está dañada, podemos podarla con unas tijeras o una sierra, si es lo suficientemente gruesa.
Principales plagas y enfermedades.
Aunque históricamente siempre hemos visto que las coníferas son especies resistentes y centenarias, cada vez sufren más problemas relacionados con nuevos parásitos (especialmente los que afectan a la madera) y enfermedades que obstruyen los canales linfáticos.
Juniperus horizontalis parásitos
Las principales plagas de las coníferas son las cochinillas, que se encuentran en los tallos, chupando la savia y debilitando lentamente al enebro rastrero. Son fáciles de identificar y se pueden eliminar de forma respetuosa con el medio ambiente con jabón potásico o aceite de parafina.
- cochinilla algodonosa
- orugas defoliadoras
- cerculiónidos
- nematodos de la madera
enfermedades de Juniperus horizontalis
Pardeamiento de coníferas
Esta enfermedad es bastante común en coníferas que sufren periodos de lluvias e inundaciones, donde proliferan hongos tipo fitófora, que actúan opcionalmente y se activan en condiciones de baja oxigenación. Este hongo obstruye los canales linfáticos y termina secando ramas enteras, de ahí el nombre de «pardeamiento». Está tratado con materiales activos como Fosetil Aluminio, que puedes encontrar en tiendas especializadas dedicadas a la agricultura y online.
Juniperus horizontalis cultivado en macetas
Debido a las características rastreras que ofrece este enebro rastrero y a su lento crecimiento, se adapta perfectamente a la cultivo en macetas. Para ello, seguiremos las recomendaciones anteriores añadidas a la información adicional que proporcionamos a continuación:
- Localización: exterior, ambiente fresco y buena iluminación (incluyendo sol directo).
- Sustrato: buen drenaje, con mezcla de turba y grava o restos de corteza.
- Irrigación: muy moderado, una vez por semana.
Esta especie se puede adaptar al cultivo de bonsái, utilizando el conocido sustrato akadama.